Lo primero, y quizás más importante, es no abrigarse en exceso. Sí, los primeros minutos en la calle van a ser difíciles, pero a medida que el cuerpo entre en calor te vas a dar cuenta que esa segunda campera estuvo de más… Sí querés podés salir con guantes o un gorrito, estos son más fáciles de guardar en los bolsillos.
Otro dato interesante es la existencia de las camisetas especiales parar correr en condiciones de frío extremo. Probablemente impliquen una pequeña inversión, pero si sos de salir a correr incluso en vacaciones de invierno quizás sea una buena idea.
En segundo lugar, el precalentamiento es muy importante en esta época del año. Lanzarse a la calle sin haber calentado los músculos puede derivar en lesiones.
Asimismo, es importante no demorarse en volver a estar bajo techo. Pasar demasiado tiempo en la intemperie estando transpirado puede resultar en resfríos.
En tercer lugar y ante condiciones climáticas adversas como lluvias con intensidad, se recomienda no pasar mucho más de 30 minutos bajo el agua.
La respiración es otro punto que debes tener en cuenta, hacerlo correctamente ayuda a prevenir enfermedades. Procurá inhalar siempre por la nariz y exhalar por la boca.
Por último, es recomendable continuar el consumo de verduras y frutas para ayudar al sistema inmunológico a tener los minerales y vitaminas necesarios.
También, si tenés la posibilidad de elegir, lo ideal es salir a correr de día cuando el sol esté pegando de frente.